Pasando de la pasión al trabajo. Este ha sido el sello de la historia de la familia Scaramellini, iniciada por su actual líder y piloto, Marcelo Scaramellini, presidente de JasFly S. A., el principal operador comercial en Argentina.
Desde que tiene memoria a Marcelo le han gustado las aeronaves. Su familia siempre se dedicó a la construcción, especializándose en grandes obras de gasoductos e hidráulicas en Argentina, donde han erigido todo un legado respecto a rubro que desarrollan.

A los 18 años este emprendedor realizó el curso de piloto de avión, impulsado por la pasión y por una suerte de presentimiento de que algún día podría incluir a la aviación dentro de sus actividades empresariales, lo que le fue permitiendo tomar trabajos a distancias más lejanas, pero regresando siempre a dormir a su hogar junto a su familia.

En el año 1994 comienzan a evaluar la posibilidad de comprar un helicóptero, y un amigo les recomendó comprar Bell: “Bell es mi familia, nos conocen y los conocemos”, dice Scaramellini. Fue así como el helicóptero se convirtió en la herramienta de trabajo más importante dentro de la empresa, agilizando operaciones en lugares inaccesibles y reduciendo los tiempos en una fracción de lo que demandarían otros medios.
Con su base central en la ciudad de La Plata, JasFly brinda servicios de trabajo aéreos con helicópteros en todo el territorio argentino a organismos estatales y empresas privadas. Cuentan con helipuerto propio en una ubicación estratégica, lo que les permite realizar sus operaciones tareas de manera rápida y eficaz.
Su historia está vinculada a un solo fabricante: Bell. Su flota está compuesta por cuatro aeronaves: 206 Jet Ranger III (de 1995), 407 (2011), 412EP (2005) y un 407GXP (2013), todos adquiridos nuevos de fábrica, lo cual los convierte en la flota más moderna que opera actualmente en Argentina.
“Somos operadores exclusivos de Bell y contamos con nuestro propio taller”, añade el aviador. Con más de 25 años de experiencia y más de 2.000 horas de vuelo sin incidentes, JasFly ha realizado una gran variedad de misiones, especialmente en el rubro de la ingeniería, efectuando relevamientos de trazas, control y verificación de cauces y ductos en áreas de difícil acceso o zonas urbanas.
Combatiendo incendios en el sur
En la turística ciudad de Bariloche, a unos 1.347 km de Buenos Aires, se vivió el azote de las llamas en los bosques aledaños a la zona de hoteles y residencias. Se consumieron unas 7.500 hectáreas cerca de la localidad de El Bolsón. Las autoridades provinciales harían la solicitud de combatir el fuego con todos los medios disponibles, y donde se plegaría cerca de 300 brigadistas, aviones de extinción y el Bell 407 que JasFly opera en la zona.
“No hay personas lesionadas ni viviendas involucradas. Es netamente forestal, tampoco hubo que provocar la evacuación de los vecinos, que se autoevacuaron por el miedo de la situación”, dijo la subsecretaria de Defensa Civil de Bariloche, Patricia Díaz.
El actuar de las aeronaves, y particularmente del Bell 407 que tomaba agua del lago, también realizó patrullajes de apoyo de las fuerzas de seguridad bajo contrato gubernamental. A lo anterior se suman otras misiones de aplicación de la ley, control y prevención de incendios, apoyo logístico de cargas, filmaciones para cine, publicidad y televisión, misiones en zonas de catástrofes y gran variedad de controles ambientales.
“Somos la primera empresa nacional de servicios con helicópteros especializada en combate contra incendios con sistema Bambi Bucket de 950 litros”, detalla Scaramellini.
Vaca Muerta
Desde septiembre de 2018 también están establecidos con base y hangar en el aeropuerto internacional de Neuquén para abordar servicios aéreos en el mundo del petróleo y gas, específicamente para el mundialmente conocido proyecto de Vaca Muerta, que se encuentra a unos 100 km y dos horas vía terrestre desde la capital de la provincia.
Aquí trabajan junto a firmas del negocio de los hidrocarburos tanto para el transporte de técnicos, ingenieros y ejecutivos, como también en el traslado de herramientas para las zonas de perforación y construcción que mantienen una operación constante, y permiten a la firma seguir trabajando en la zona.
Sin embargo, el avance de la pandemia, al igual que a casi todo el sector, le ha conferido un duro golpe, pero que, hasta hoy, JasFly ha conseguido sortear. “El 2020 fue un año muy particular, especialmente para las empresas aeronáuticas. Hemos sabido subsistir ante la pandemia, adecuando rápidamente nuestra flota, personal y protocolos para poder dar continuidad a los servicios esenciales que brindamos a nuestros clientes tales como: control de ductos para petroleras, asistencia aérea para la seguridad pública, control de fauna, relevamientos hídricos y especialmente el combate de incendios forestales”, cuenta Gabriel Ciezar, gerente de operaciones de JasFly.
Igualmente, la empresa se mantiene firme ofreciendo una amplia gama de servicios que aportan de manera invaluable al quehacer industrial de uno de los países más grandes de América.